martes, diciembre 3, 2024

Un Plan de Comunicación de Crisis para la familia Real Británica

De una comparecencia del rey en televisión a la función difusora de las embajadas del Reino Unido en el mundo. El experto en comunicación de crisis, y analista de casas reales europeas, Julio García Gomez, ha remitido a la Embajada de Reino Unido en España un Plan de Comunicación de Crisis.

26 de junio de 2024

Ante la situación actual de la familia real británica, cuajada de acontecimientos que ensombrecen la quietud y paz de sus miembros, entre otros asuntos de calado por cuestiones de salud, es necesario acometer un Plan de Comunicación de Crisis para conseguir avanzar y dar signos de efectividad y transparencia  a la ciudadanía de Gran Bretaña y del mundo.

A la enfermedad de Carlos III y de la Princesa de Gales, Kate Midleton, se suma ahora el infortunio en la princesa Ana de Inglaterra, ingresada en el hospital por traumatismo y heridas tras sufrir un accidente. Esto ha supuesto que la miembro de la familia real, que tiene más compromisos públicos, se vea obligada a cancelar la agenda.

El Plan de Comunicación de Crisis para la familia real británica debería responder a tres vectores de acción:

  • Instantaneidad en la información
  • Adelantarse a las redes
  • Buscar la complicidad del ciudadano con mensajes directos y personales

Según Julio García Gómez, estas premisas se centrarían en un decálogo de puntos a implementar:

1.- Evitar el rumor en todas sus facetas proyectando informaciones desde el Palacio de Buckingham como “agencia” de noticias. Sin saturar, pero de manera periódica, en días y horas fijados de antemano, informar de la situación de sus miembros de forma concreta.

2.- El rey en la BBC. Sacar más partido y rendimiento a los medios de comunicación audiovisuales. Además de la difusión de vídeos en redes, se hace imprescindible una comparecencia pública del monarca en BBC para el mundo, como hizo su madre, Isabel II, en ocasiones puntuales. La fuerza del medio televisivo, manejado con destreza, siempre obtendrá buenos resultados.

3.- Viralizar posteriormente en redes sociales. A raíz de esa comparecencia del rey en televisión, que propongo, trocear en píldoras lo más significativo en titulares para viralizar posteriormente en redes sociales de modo que se complemente la tv tradicional con la difusión en los canales online de mayor audiencia.

4.- “Historias de vida” Los medios de comunicación como apoyo a la difusión, evitando las noticias falsas y apoyando el valor y singularidad de la Casa Real y sus miembros: “historias de vida” de los momentos más emotivos que viven Carlos III y Kate Midleton en el entorno familiar y social, con las anécdotas más significativas sobre su capacidad de recuperación y superación.

5.- Tengo una pregunta para Su Majestad. Prevención de la enfermedad. A diario se reciben miles de cartas en las dependencias de correos de Buckingham, pero sería necesario crear un buzón especial físico y online para que los ciudadanos pudieran realizar preguntas directas sobre el estado de salud de sus miembros y a la vez que sirviera para concienciar a las personas sobre la prevención de la enfermedad y promoción de la salud.

6.- Una imagen más que mil palabras. Realización de sesión fotográfica y vídeo del día a día de Carlos III; los encuentros oficiales en su despacho, su tiempo de trabajo y ocio, el makin-of de la “persona” por encima del monarca: “de carne y hueso”.

7.- Rueda de prensa, un elemento transgresor. Se trataría de realizar una comparecencia con un grupo de representantes de diferentes áreas y estratos de la sociedad británica que sería una auténtica novedad, difícil de ejecutar con la actual mentalidad del equipo asesor de comunicación del  Palacio de Buckingham. Hace alrededor de tres meses la Casa Real británica difundió la oferta laboral en busca de un asistente de comunicación que esperemos pueda tomar nota de estas propuestas.

8.- “Una excelente comunicación oral y escrita” -y yo añadiría de proyección de imagen y lenguaje no verbal- eran las condiciones que se pedían al candidato a experto en comunicación de la familia real. Podemos deducir de esa premisa que es una preocupación constante de sus miembros transmitir la mejor imagen y utilizar estratégicamente el lenguaje verbal, gestual y paralingüístico.

9.- Mucho que aprender de otros modelos. La monarquía inglesa tiene una acreditada tradición en comunicación social. No obstante, en los últimos tiempos podríamos decir que habría que reforzar situaciones y momentos complicados, alguno de ellos propiciados por el distanciamiento de Harry y todo lo que envolvió a sus declaraciones y la publicación de sus libro.

10.- Embajadas del mundo, nexo de comunicación. Es imprescindible apoyar todas estas acciones con las Embajadas del Reino Unido en el mundo, como correa de transmisión, para, desde el epicentro de la crisis, irradiar información a estas delegaciones en formato de news y concesión de entrevistas por parte del personal diplomático a periodistas de cada país y colaboración con los corresponsales extranjeros.