MÓNICA GONZÁLEZ ORTÍN, COUNTRY MANAGER DE AXICOM EN ESPAÑA Viernes 11 de mayo de 2018
Predecir el futuro es muy complicado y más en un sector donde los cambios son constantes.
Sin embargo sí me atrevo a apuntar algunos escenarios como posibles retos a los que se tendrá que enfrentar el profesional de comunicación en los próximos 10 años
- La micro comunicación se impondrá a la comunicación de masas.
- Contar historias, lo básico, no cambiará. Entender los parámetros que componen una buena historia, como paquetizarla y conseguir que resulte de interés y hacerlo de manera adecuada seguirá siendo clave. Quizá cambiará la ejecución pero no la base.
- Métricas y cuantificación del valor. Nada escapará al alcance de herramientas de medición precisas. Las agencias deberán contar con expertos en datos y la industria tendrá que desarrollaran nuevas herramientas y métricas para poder mostrar de forma más óptima el valor que aportan al negocio de los clientes
- Las tácticas de pago estarán normalizadas. Será rutinario para los profesionales de relaciones públicas integrar canales y medios de pago para ampliar la distribución de contenido.
- La creatividad será todavía más importante. En la era del contenido de calidad habrá que desarrollar cada vez más la capacidad de generar historias creativas, novedosas y llamativas.
- Las líneas entre los medios sociales y tradicionales se habrán difuminado y los medios de comunicación móvil serán habituales con contenido más corto incorporando incluso realidad virtual lo que requerirá mayor especialización.
- A medida que la tecnología mejore, el ciclo de noticias y flujo de trabajo será aún más incesante, de 24 horas. El profesional de PR deberá aprender y sofisticar cómo gestionar cantidades ingentes de información y desarrollar nuevos sistemas de análisis y control. También Deberá lidiar con fuentes poco fiables. procedentes de cualquier lugar del mundo que se replicarán de forma inmediata, sin ningún tipo de contraste de información
Adaptarse rápidamente y ser flexible y permeable, formara echa parte del día a día de los profesionales de comunicación que tendrán que mantenerse en “modo aprendizaje” constante y mantener la mente despierta para poder enfrentarse con éxito a los retos que todavía quedan por llegar.