ARTÍCULO DE ISABEL AIRES, CEO DE AIRES NEWS / Ante esta situación, «sólo queda reconvertirse y valorar cuáles son las mejores vías de comunicación para ayudar a nuestros clientes y otras marcas que ahora necesiten más que nunca darse a conocer o relanzar su imagen. Tenemos el gran desafío de desarrollar nuevas habilidades y oportunidades y debemos sacar partido a estos momentos extraordinarios para adaptarnos».
Este bicho llamado Covid19 ha arrasado a su paso con todo como virus que es. Salvo algunas actividades que se sentirán impulsadas por su oferta, otros tienen un duro camino desde ahora y hasta tiempo después de que la situación se normalice. Uno de los casos más evidentes es el de la restauración. Gastronomía, ocio y turismo son sectores que por el decreto de cierre y la incertidumbre de cuándo y con qué medidas abrirán, se van a ver muy afectados. Nuestra agencia, al estar especializada en este tipo de clientes, por supuesto sufrimos los daños colaterales y también nos hemos visto perjudicadas. Ante esto, sólo queda sentarse, reconvertirse y valorar cuáles son las mejores vías de comunicación para ayudar a nuestros clientes y otras marcas que ahora necesiten más que nunca darse a conocer o relanzar su imagen. Tenemos el gran desafío de desarrollar nuevas habilidades y oportunidades y debemos sacar partido a estos momentos extraordinarios para adaptarnos.
Lo primero para esta adaptación es mirar al futuro junto al cliente, escucharle. Porque para muchos será un antes y un después, y si queremos caminar junto a él, tendremos que ver sus necesidades de comunicación, valorar pautas que sigan en otros países por si nos pudieran servir a nosotros… ¿Podemos poner servicio de delivery? ¿Quizás si somos un restaurante de alto nivel podemos hacer un concepto más ‘casual’? Debemos personalizar y valorar para cada uno una estrategia diferente de comunicación, porque no todo sirve igual para todos.
Por eso necesitamos tener más cercanía con el cliente, generar relaciones interpersonales más allá de la relación laboral, saber cómo se encuentran, cómo está su familia, qué problemas económicos les va a acarrear esta situación. Los valores deben primar en estos momentos, empatizar hasta el punto de cuidar cada céntimo de los honorarios que nos van a pagar como si fuera nuestro.
Por supuesto debemos ser muy sutiles a la hora de realizar labor comercial en cuanto a la captación de clientes que hacen comunicación por primera vez, ya que no sabemos en qué circunstancias se encuentran y nuestra necesidad de captar nuevas firmas puede resultar contraproducente y dar la imagen de insensibles.
Las agencias de comunicación tenemos un reto muy importante y es que debemos echar grandes dosis de creatividad que nos llevará en muchos casos a reinventarnos para conseguir nuevas oportunidades. Que nuestras ideas, surgidas de la curiosidad, ayuden a aportar valor, por ejemplo mirando hacia otros países que nos llevan semanas o meses de ventaja para ver qué se está haciendo allí. En nuestro caso: ¿Qué medidas se están tomado en Europa para hacer que la restauración sea segura y no poner en peligro ni a cliente ni a empleado? El tiempo es oro y no podemos perderlo en definir estrategias para orientar nuestro trabajo, por eso tenemos que estar ojo avizor e investigar para adaptarnos a los nuevos tiempos que van a llegar.
En el caso de la comunicación gastronómica, viendo cómo avanzan las medidas que se van tomando por parte del Gobierno y la incertidumbre sobre la fecha de apertura, hay varias vías que debemos plantear a nuestros clientes para poder llevar a cabo una buena estrategia de comunicación: fomentar el delivery o el catering, apostar por productos de Km 0 y por la marca España para apoyarnos entre todos; reducir el aforo de los restaurantes para evitar contagios y además hacer varios turnos; implementar medidas de higiene como pantallas protectoras, dispensadores de alcohol en las mesas; apostar por cocina elaborada frente a cruda; proponer modelos de negocio con tickets medios más bajos para hacerlos más atractivos a los comensales, etc…
En nuestro caso plantearemos estrategias más asequibles para los clientes con menos presentaciones o eventos a medios de comunicación, reduciremos los almuerzos de prensa y los envíos de producto a los periodistas serán con un listado más estudiado aún para dar en la tecla adecuada tratando de minimizar costes para la marca. Quizás es momento de plantear campañas puntuales de comunicación más allá de contratos continuados para ayudar a dar visibilidad a los clientes en su recuperación.
Debemos practicar la resiliencia con nuestros clientes, darles una visión positiva de que conseguiremos que vuelvan a estar en la cresta de la ola o al menos con una mejor previsión de la que ahora mismo tenemos.