Comer o tomar algo al aire libre ya no es exclusivo de los meses estivales. La temporada se ha alargado y con la bajada del mercurio podemos seguir haciendo una de las actividades preferidas de los madrileños: el ‘terraceo’. La Terraza del Santo Domingo que tras el cierre de la piscina se transforma en un espacio agradable y perfectamente acondicionado para el otoño/invierno donde todo el mundo quiere ir, y es que conseguir una mesa para los días clave de la semana no es tarea fácil.
Por Redacción, 22 de octubre de 2021
Parte de la ‘culpa’ se debe a su envidiable ubicación, junto a la Gran Vía, en la séptima planta del hotel Santo Domingo, desde donde se pueden contemplar unas vistas panorámicas excepcionales y una puesta de sol única con su icónico jardín colgante a los pies.
Se calman las aguas bajo el cristal y sobre él volvemos a disfrutar de la buena y cuidada cocina informal perfecta para compartir, ahora con toques otoñales. Llegan a los entrantes de la carta por ejemplo la Tosta de remolacha con boquerones en vinagre, puré de remolacha y micro espinacas naturales, unos divertidos Taquitos de cochinita pibil con cebolla roja encurtida, lechuga en juliana y salsa agria, una versión viajera del bocata más madrileño: Pan bao con rabas de calamar, con alioli de chiles rojos, o una de las tapas más demandadas en nuestro país, las Patatas a las tres salsas (brava, alioli negro y espuma de kimchi). Entre los principales, con todo el sabor de la estación nos encontramos un Arroz de pato confitado con trompetas de la muerte, unos Raviolis de rabo de toro, un Risotto de queso gorgonzola con shiitake, calabaza y nueces, Canelones de wanton gratinados, y dos pescados que siempre apetecen: Lascas de bacalao confitado, que acompañan con verduras asadas, espuma kimchi y crujiente de pan de especias y Salmón con salsa de sabayón de naranja.
También a los postres llega alguna novedad, como su Pan perdido, sopa de chocolate y espuma de leche condensada, sin duda un viaje a la infancia… Y tanto en entrantes como en principales, varias opciones aptas para celíacos. Su menú degustación, ideal para probar un poco de todo entre tanto que apetece, incluye su exitosa selección de croquetas, otro entrante, dos principales y un postre por 28’50 € por persona. Para quienes no hayan probado aún sus cócteles, algunas recomendaciones que siempre triunfan: Pure Garden, con ginebra, frambuesas, menta y miel de ágave, el ya clásico Sex in Santo Domingo -vodka, licor de melocotón, puré de mango y zumo de arándanos- o el imprescindible Zombie by Creps al Born, que lleva rones especiados, zumo de naranja y puré de fruta de la pasión.
La Terraza del Santo Domingo (www.laterrazadelsantodomingo.es), abre de lunes a domingo a partir de las 13:00 horas y la cocina desde esa hora hasta las 16:00 a mediodía y de 20:00 a 23:00 h. por la noche de domingo a jueves, y viernes y sábados hasta las 00:00 horas. El precio medio es de 30 €. El hotel y sus espacios gastronómicos poseen el sello ‘Safe Tourism Certified’ que garantiza el cumplimento de un protocolo de medidas en prevención del COVID19, homologado por el ICTE (Instituto para la Calidad Turística Española) y certificado por consultores independientes. Las reservas de comida o cena incluyen 2 horas de estacionamiento gratuito en el parking del hotel* (San Bernardo,1 -*Sujeto a disponibilidad de plazas). Para estar al día de todo, estas son sus RRSS: @terrazasantodomingo (IG); @laterrazadelsd (TW); La Terraza del Santo Domingo (FB).
