ARTÍCULO DE IMMA FOLCH (FUNDADORA Y CEO DE LF CHANNEL) / La diversidad en el entorno corporativo es fundamental y es un tema que preocupa a dirigentes y líderes empresariales, independientemente del ámbito en el que trabajan. Así lo refleja el índice de Confianza de la asociación internacional de agencias independientes Worldcom PR Group, que mide mensualmente cómo cambia el nivel de confianza de las personas en cargo de dirección respecto a los temas que más les preocupan.
Por Imma Folch, fundadora y CEO de LF Channel / 5 de abril de 2022
La diversidad y la inclusión fueron las principales prioridades a finales de 2021, superando a otros temas como la retención del talento o la situación de la economía. Sorprende este dato en un momento económico y de negocio como el que estábamos atravesando a finales de año. O, quizá, no tanto. Quizá las personas líderes de las compañías ya se están dando cuenta de la relevancia de la diversidad no solo como valor, sino como punto diferencial y rentable para los negocios.
Y es que, por ejemplo, según Gallup Workplace, los ambientes laborales inclusivos aumentan en un 22% la productividad. Por este motivo, muchas empresas se esfuerzan por lograr la diversidad en el lugar de trabajo. Esto se traduce no solo en una mejora de la reputación de la compañía, sino también en otros beneficios inmediatos y tangibles relacionados directamente con el resultado final de la empresa, como la variedad de perspectivas, la creatividad o la mejor toma de decisiones. Por tanto, podemos afirmar que la diversidad empresarial es una gran ventaja competitiva.
Diversidad en un mundo global
Aunque la diversidad es un concepto global, su aplicación e integración en las políticas empresariales no es uniforme, ya que varía según el contexto cultural y social de cada país. El caso de España es representativo debido a la naturaleza de su lenguaje, en el que no existe un género neutro. Por tanto, el uso del español convencional no integra de la misma manera a hombres y mujeres y favorece la desigualdad entre ambos colectivos. Por este motivo, el uso del lenguaje inclusivo dentro de las estrategias de comunicación es esencial para poder interpelar a todos los públicos. En nuestro caso, uno de los aspectos primordiales tanto para mí como para las personas de mi equipo es promocionar y dar altavoz a la comunicación inclusiva.
Tampoco podemos olvidar el contexto interno de las compañías. La comunicación con el equipo también tiene que ser responsable desde el punto de vista de la diversidad. Además, si una cosa ha generado la pandemia ha sido un aumento del alcance de la comunicación interna. Con la implantación del trabajo en remoto, las interacciones empresariales han dejado de estar relegadas a la oficina. Las circunstancias personales de cada persona son únicas, y por ello debemos entender la diversidad como parte del ADN de nuestras relaciones.
Las favoritas: las empresas con razón de ser
Lograr la diversidad no es un objetivo independiente si no que se integra dentro de un denominador común: generar compromiso de marca. Más allá de ofrecer servicios o vender productos, las compañías buscan representar valores, y los consumidores quieren consumir marcas con propósito. En este sentido, ya no es suficiente con hablar de sostenibilidad o responsabilidad social corporativa: ahora el concepto clave son las políticas ESG. Aquellas empresas que tengan en cuenta tanto los factores ambientales, como los sociales y de gobierno corporativo, serán las que se posicionen por delante.
Vamos por buen camino, pero es importante hacer una revisión continuada de nuestras acciones para poder identificar estereotipos o clichés que venimos asumiendo durante toda nuestra vida y que quizás, analizados desde el punto de vista de la diversidad, necesitan cambiarse. Es desafiante, pero debemos asumir la responsabilidad individual que cada una de nosotras tenemos en este cambio.
Como presidenta de Diversidad, Igualdad e Inclusión de Worldcom PR Group, celebro la relevancia que están obteniendo temáticas como la diversidad y la inclusión e insto a las compañías a incluir estos factores en sus agendas de tal forma que se pasen a formar parte de sus raíces y valores.
