El expresident de la Generalitat, Carles Puigdemont, pronunció un discurso en Bruselas a mediodía del pasado jueves tras el acuerdo entre PSOE y Junts que despeja la investidura de Pedro Sánchez para los próximos días.
Por Julio García Gómez, experto en comunicación pública y expresión política / 10 de noviembre de 2023
El analista de comunicación Julio García Gómez comenta los siguientes aspectos de expresión de Puigdemont: “Observamos desde el principio que Puigdemont mueve mucho la vista para intentar que calen sus mensajes a pesar de la monotonía que muestra su voz. Mira demasiado al papel para estar seguro de lo que dice y evitar desviar el mensaje. Proyecta la voz lineal durante toda la comparecencia, excepto al final. Escaso lenguaje no verbal. Mueve muy poco las manos, solo a veces la mano derecha para remarcar un destacado del texto. Pone la mano en el pecho para dar emoción al discurso a los pocos minutos del inicio. Solo mira a izquierda y derecha nunca a cámara. Debería dejar de leer en algún momento para ser más natural y convincente. Tonos de traje azul, camisa y corbata azul con aspecto institucional”.
“Muy largo el discurso con pocas pausas en el texto y voz algo agotada. Hay un esfuerzo de complicidad con el espectador en el cierre de la comparecencia cuando se despega del papel. Podemos afirmar desde el punto de vista de la expresión que el “minuto de oro” es el final en su esfuerzo por ser más directo y convincente. Gana en comunicación cuando se despega del papel y esboza una media sonrisa al final”.