sábado, diciembre 21, 2024

El Dilema de Cambiar de Agencia de RR.PP.

REDACCIÓN Martes 17 de julio de 2012

El blog de la agencia Keyprocom publicar un interesante post sobre cómo afrontar con garantías el cambio de agencia de comunicación. Por su interés, ofrecemos un extracto del mismo.

A veces, los cambios vienen dados por cierres de empresas, reorientación del negocio, etc. Pero en otras, aparecen ofertas novedosas, nuevos servicios o necesidades que antes no existían y que no toda agencia está capacitada para proporcionar (como es el caso de los servicios de social media).

 

Las grandes compañías y las multinacionales cada vez más se plantean repartir el trabajo entre múltiples consultoras, cada una especializada en una rama de la comunicación y del marketing. Las oportunidades y el provecho resulta mucho mayor y la competitividad está asegurada.

 

Sin embargo, muchos se toman este proceso como si de un cambio de pareja se tratase. Celos, dudas, e incertidumbres son algunos de los sentimientos más comunes. Veamos cómo actúan y cómo afrontar estas situaciones de la mejor manera.

 

  • Vínculos: Los profesionales desarrollan vínculos durante su trabajo, por eso, en ocasiones, es complicado romperlos. Cambiar de agencia no debe suponer un trauma para nadie. Ganar o perder una cuenta es algo natural en el trabajo de las agencias.

 

  • Incertidumbre: Las empresas dudan sobre los nuevos servicios. Desconocen la forma de trabajar, poseen su agencia de toda la vida y el trabajo tiene ciertas rutinas adquiridas. Laissez faire, dejar hacer, con el comienzo de la actividad desaparecerán progresivamente las dudas.

 

  • Celos: Cuando una agencia conoce que hay otra empresa trabajando en labores de comunicación pueden generarse celos. ¿Qué harán? ¿cómo lo harán?  ¿querrán dejar de contar con nosotros? Son algunas de las dudas que surgen en el seno de las agencias. El enfoque correcto es intentar esforzarse y aprender, en la medida de lo posible, ante el nuevo reto.

Ante estas situaciones caben diferentes mentalidades y maneras de afrontar el cambio. Aquí proponemos algunas.

 

  • Otra agencia: ¿Por qué tener sólo una agencia? Muchas compañías pueden satisfacer mejor las necesidades del cliente en un determinado ámbito. Por ejemplo, en ocasiones hay clientes que poseen su agencia de medios, pero confían su comunicación de crisis o formación de portavoces a otras agencias. ¿Cuál es el problema? La respuesta debería ser sencilla: ninguno. Cada cual posee su especialidad y puede ofrecer un mejor servicio en uno u otro ámbito.

 

  • Cambio progresivo: Los cambios no tienen por qué ser radicales. Es imposible tener la misma relación y compenetración con dos personas diferentes y mantenerlas al mismo ritmo. Del mismo modo ocurre en el ámbito laboral. No debemos exigirnos ni esperar tener algo idéntico a lo conocido. Poco a poco iremos descubriendo la ‘personalidad’ de la nueva agencia y su metodología de trabajo.

 

Leer el post completo