ALMUDENA AGUIRRE, DIRECTORA DE CUENTAS DE MODA EN PIAZZA COMUNICACIÓN Martes 3 de abril de 2018
Desde hace tiempo el vínculo entre las celebrities y las marcas cada vez es más estrecho y más real.
Atrás quedaron las grandes campañas de publicidad con top models. Ahora son presentadoras, actrices, cantantes o incluso influencers que han conseguido superar en seguidores a nuestras famosas más top convirtiéndose también en celebrities.
Cuando una marca comienza una relación con una celebrity, lo fundamental es dar con el perfil adecuado que sea afín a los valores de la firma, que exista una conexión, que le guste el producto y que se parezca a lo que utiliza en su día a día, de esta forma ayuda a construir la imagen de marca aportando más credibilidad.
Para elegir un embajador de marca hay que estudiar a fondo la empresa, cómo quiere posicionarse, cuáles son los valores de marca, el target al que se quiere dirigir, y el presupuesto con el que cuenta la marca. Una vez hecho esto, se presenta un abanico de posibles embajadores de marca que encajen con esos objetivos definidos por la marca y que tenga una buena relación con la prensa. También hay que tener en cuenta con qué otras marcas trabajan, a qué eventos van a acudir en las fechas en las que contaremos con él/ella para nuestros eventos y evitar una sobre-exposición mediática.
Cada vez es más frecuente que la celebrity se involucre más en la colaboración con la firma, no son solo una imagen o embajador/a, trabajan conjuntamente en la definición del mood de la campaña, e incluso en el diseño de la colección o de un producto concreto. No quieren asociarse a un solo evento, quieren que el recorrido conjunto se alargue en el tiempo para no sentirse solo un producto y dar más sentido y credibilidad a esta sociedad que crean.
Una de las principales ventajas de la relación celebrity-marca es la inmediatez en la repercusión mediática, ya que además de crear notoriedad para la marca llegamos más rápido al consumidor final. Además, el ROI suele superar al que se consigue con la contratación de un espacio publicitario tradicional en el medio, ya que un personaje tiene muchas facetas que interesan a distintos tipos de medios: moda, social, etc. En los últimos tiempos hay menos anuncios publicitarios y más acciones especiales en las que la celebrity se involucra, con esto conseguimos rapidez y que medios como la televisión hablen de nosotros sin contratar un espacio pagado.
Una celebrity siempre es positiva para aumentar las ventas y el branding, pero siempre debe estar unida a una buena estrategia de comunicación.
Artículo de Almudena Aguirre, directora de cuentas de Moda en Piazza Comunicación