En un catálogo cada vez más extenso, las nuevas generaciones no buscan la oferta más novedosa, buscan cocrear.
Por Both People & Comms / 18 de diciembre de 2023
Para las organizaciones de hoy formar a sus colaboradores es una prioridad. El mundo va tan rápido que acompañar a las personas en su desarrollo es una necesidad imperante para mantenerse en la liga de la competitividad.
Además, en una sociedad donde la vida pasa a toda velocidad y constantemente vemos contenido nuevo, los colaboradores, y sobre todo las nuevas generaciones, buscan también contenidos y conceptos nuevos para desarrollarse y crecer tanto como personas como profesionales.
En este contexto, y conscientes de su papel clave, las formaciones son tendencia y las vemos ordenadas en catálogos extensos donde hay para todos los gustos y colores. Ahora bien, no todas son igual de atractivas. Para conectar con todas las generaciones, hoy ya no nos sirve preparar un contenido impecable y plasmarlo en presentaciones cuidadas, porque en un mundo laboral cada vez más Z, las formaciones deben aportar un nuevo valor añadido.
Las generaciones que se están incorporando ahora en el mundo laboral quieren aprender cocreando. Quieren escuchar, tomar las notas justas, hacer fotos a los datos clave y preguntar. Además, quieren conectar los conceptos nuevos con su día a día ahí mismo y explicar su opinión para construir su takeaway en directo, con el diálogo que se vaya generando en la sala.
Por esto, para ellos las formaciones son efectivas en petit comité, en círculo. Creando un ambiente de confianza psicológica, donde no hay juicio y donde todas las aportaciones suman. Buscan encuentros de desarrollo donde el contenido se construye a medida que avanza la formación.
Es así como se caracteriza el Junior Program, un programa que celebró su tercera edición el pasado mes de noviembre, organizado por Both People&Comms – A Newlink Company, con el objetivo de acompañar al talento joven en la adquisición de conocimientos y habilidades clave en el área de comunicación interna.
Además, este espacio de desarrollo se completa invitando, aparte de lxs participantes y formadorxs, a profesionales del tema que estén activo para compartir best practices.
Estas formaciones tan atractivas requieren, a la vez, un compromiso bidireccional. Por una parte, de quien atiende, pues está dispuestx a participar, aprender y cocrear –aquí no se vale cerrar la cámara o mirar un pptx e ir avanzando física o mentalmente con otras tareas mientras nos cuentan cosas. Y también, por parte de la persona que conduce la formación, ya que juega un papel de facilitador/a, donde el expertise, la capacidad de generar engagement y la velocidad para ir adaptando y generando contenido en directo es clave.
La transversalidad ha llegado para quedarse e ir implementándose en todas las áreas de nuestras organizaciones, y las oportunidades que está generando en las formaciones son enormes.
Para ofrecer formaciones de valor a las nuevas organizaciones hay que tener en cuenta:
- Grupos pequeños para generar espacios de confianza.
- Creación de una agenda flexible, donde se irán incorporando inquietudes y nuevos aspectos en directo.
- Contar con la presencia de expertos en activo, como invitados especiales, para compartir ejemplos reales y best practices durante la sesión.
- Más allá de dinámicas, generar momentos de trabajo en equipo.
- Como parte de la sesión, preparar un cierre informal, donde se cambia el networking por el beyondworking.