Las Naciones Unidas pone en marcha con el estudio de diseño estratégico GRAND una serie de iniciativas para promover la perspectiva de género mediante la innovación. El diseño y la transformación digital son claves para que las empresas generen un impacto positivo en la sociedad mientras son económicamente rentables.
Por Redacción, 21 de septiembre de 2021
Los Objetivos para el Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 están más de actualidad que nunca y han marcado una serie de estrategias y desafíos concretos para empresas, gobiernos y la totalidad de la sociedad. La Covid-19 hizo saltar por los aires muchos de los escenarios que dábamos por sentado, especialmente los que se basaban en desequilibrios que han dejado de sostenerse. Esto ha abierto una serie de incertidumbres, pero también ha empoderado a la sociedad con respecto al nivel de compromiso que exigir a empresas y organizaciones. Y a su vez, las empresas privadas necesitan prepararse para lo que depara el futuro. Uno de esos desafíos pasa por lograr la igualdad de género y el empoderamiento de todas las mujeres y niñas.
El camino para la igualdad de género de la ONU a través de la innovación
Los enfoques tradicionales no serán suficientes para lograr la igualdad de género. Por eso, la ONU está explorando con el estudio de diseño estratégico GRAND, nuevas soluciones y enfoques integrados para un cambio transformador y sistémico.
«Hasta ahora se actuaba reactivamente a medida que surgían las necesidades. Pero la sociedad ahí fuera avanza más rápido que en los despachos y no hay un solo futuro, sino múltiples escenarios futuros sobre los que hay que reflexionar utilizando metodologías ágiles que nos permitan actuar desde la empatía. Las personas son el núcleo de lo que hacemos, por eso hay que escuchar activamente a todos los stakeholders, para conseguir el cambio organizacional, diseñar estrategias, productos y servicios que generen un cambio positivo en la sociedad y, igual de importante que lo anterior: medir ese impacto en términos económicos, ecológicos y sociales», dice Enrique Grandía, fundador del estudio de diseño estratégico de Madrid.
Algunas de esas iniciativas se materializan en el proyecto «Innovation Pathways for Gender Equality», donde GRAND ayudó a las Naciones Unidas a promover un enfoque de género en sus procesos de innovación, acelerando los planes creados por mujeres para mujeres, siguiendo estrategias de innovación como la co-creación, análisis de comportamiento y design thinking.
El diseño, herramienta clave para transformar realidades
Otra de las acciones clave de las Naciones Unidas (UN Women) para evidenciar las desigualdades de género existentes, son las campañas comunicativas. Aquí, GRAND creó un lenguaje fresco pero formal, que celebrase que el mundo ha conseguido grandes avances, pero aún queda mucho por hacer para conseguir un futuro mejor. A través de diferentes trabajos de diseño como la «Beijing Declaration and Platform for Action», muestran cómo para millones de mujeres y niñas, la violencia y las prácticas dañinas, basadas en la discriminación de género y las normas del patriarcado, siguen sucediendo con las consecuencias que esto implica.
Innovaciones creadas por mujeres, para mujeres
Las mujeres empresarias también se han visto profundamente afectadas por la pandemia de la Covid-19. A pesar de los programas de apoyo y capacitación, sigue existiendo una brecha en cuanto a condiciones y oportunidades de apoyo para acelerar sus ideas y proyectos más allá de los mercados locales.
“Desde la banca móvil hasta la inteligencia artificial, es vital que las ideas, inquietudes y experiencias de las mujeres también influyan en el diseño y la ejecución de las innovaciones que formarán parte de las sociedades futuras» dice la Directora Ejecutiva de UN Women, Phumzile Mlambo. En respuesta a esta brecha, las Naciones Unidas encargó a GRAND diseñar un espacio para conectar, crear y acelerar el crecimiento y nuevos modelos de negocio de mujeres de Europa y Asia Central. Así, UN Women organizó su primer evento online que permitió a mujeres emprendedoras de más de 12 países conectarse con empresas e inversoras, mejorar sus productos y servicios, ampliar sus canales de venta y hacer crecer su negocio de forma sostenible. Más de 200 mujeres empresarias de Europa y Asia central se conectaron entre sí y con socias del sector privado para ampliar sus redes. Tras el éxito de su primera edición en 2021, se prevé que la Women’s Entrepreneurship Expo siga celebrándose en años consecutivos para seguir capacitando a las mujeres, estableciendo contactos y conectándolas con otras personas clave para sus iniciativas.
Un reto al que también se enfrentan empresas de todos los tamaños: pymes, start-ups o multinacionales
En GRAND llevan años trabajando con las empresas en esta dirección, puesto que se reclama a las marcas no sólo que colaboren con su entorno, sino que estén al servicio del mismo. Que generen un impacto positivo en la sociedad mientras son económicamente rentables. Por eso cada vez se habla menos de user-centered design, sino del diseño «Human Centered Design» o incluso de un «Planet-centered approach»: concebir productos y servicios colocando al planeta en el centro de las decisiones estratégicas.
La sociedad por encima del individuo.
La transformación digital, también clave para la igualdad de género
Puede parecer contradictorio que la tecnología pueda humanizar a las empresas, pero realmente es una fuerza transformadora para el cambio. Por ejemplo la inteligencia artificial (IA), ha puesto sobre la mesa ciertos debates filosóficos que requieren de honestidad en la toma de decisiones y la ética en los negocios. Por eso, por su naturaleza y alcance, obliga a la transparencia de los datos y puede hacer que sea más fácil conseguir un impacto social puesto que permite materializar el propósito y llevarlo a los últimos rincones de la compañía incluído su modelo de negocio.
«Es importante que las empresas tengan su propia Agenda 2030 con objetivos como la Transformación digital para desarrollar una estrategia de crecimiento sostenible a largo plazo que les permita prepararse para la diversidad, equidad e inclusión a todos los niveles, tanto micro (en nuestros clientes) como macro (en la sociedad)», dice Enrique Grandía, de GRAND.
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