ARTÍCULO DE GABRIEL ROMERA ( Evercom)/Nos encontramos inmersos en un cambio del paradigma de consumo impulsado por la digitalización de la economía y los servicios, y con un auge imparable de la economía de suscripción. Aunque el modelo de suscripción ha existido desde el siglo XIX, en los últimos años estamos asistiendo a un vertiginoso resurgir de este modelo, impulsado principalmente por la aceleración en la innovación tecnológica y la digitalización del día a día de las personas.
Por Gabriel Romera, Director de cuentas de la división de consumo (Evercom Life) de Evercom, 2 de noviembre de 2022
La industria tecnológica ha sido, de hecho, una de las principales responsables del actual auge de los negocios de suscripción. Hace poco más de diez años, la industria tech empezó a adoptar el modelo de ‘software como servicio’ (Sofware as a Service, SaaS), ya que le permitía llegar a más clientes al reducir la inversión inicial y obtener ingresos predecibles.
El resto de industrias y sectores no tardaron en ver y entender los beneficios de los modelos ‘as a service’ o de suscripción, y en los últimos años hemos asistido a una escalada imparable del surgimiento de nuevos servicios basados en este modelo. Durante todo este tiempo, hemos podido ver cómo industrias tan dispares como la movilidad, la moda, la alimentación y bebidas, el entretenimiento o la belleza han adoptado modelos de suscripción, dando lugar a servicios de enorme éxito como Netflix, Birchbox, Amazon Prime, Headspace o Dollar Shave Club. Prácticamente cualquier producto o servicio imaginable se ha vuelto susceptible de convertirse en una suscripción hoy en día en lo que la industria ha convenido en llamar ‘Everything as a service’ o ‘Todo como servicio’.
No cabe duda que este frenético crecimiento de la economía de suscripción está cambiando el paradigma de la adquisición tradicional, moviendo el foco de la propiedad a la usabilidad. En este sentido, la economía de suscripción plantea un enfoque mucho más sostenible del consumo. Al convertir el uso de cualquier producto en un servicio, se potencia la reutilización y se maximiza el ciclo de vida útil de cualquier producto, lo que se traduce en menos contaminación. Por un lado, se reducen los niveles de producción y, por otro lado, se reduce también la generación de menos residuos porque menos productos acaban olvidados o abandonados por sus dueños porque han dejado de ser útiles. En cierto modo, se produce un ajuste más natural entre las necesidades de un consumidor y los productos y servicios que consume para satisfacer esas necesidades, consumiendo exactamente lo que necesita sólo durante el tiempo que lo necesita.
Es precisamente en este cambio de paradigma donde radica una de las principales fortalezas de los modelos de suscripción, ya que se presentan como un auténtico aliado e impulsor de la sostenibilidad. Por extensión, la sostenibilidad se está convirtiendo en un pilar clave de las estrategias de marketing y comunicación de muchas de las empresas operando este tipo de modelos.
Tal es el caso de la plataforma de alquiler de tecnología de consumo Grover, que este año se unía a la tenista profesional Garbiñe Muguruza para lanzar una campaña de concienciación a favor de un uso más consciente y eco-friendly de la tecnología. O el caso de Simplr, una compañía española que ofrece más de 50 categorías de productos por suscripción y que nace con el propósito de sustituir el actual modelo de usar y tirar. Simplr sustenta sus comunicaciones en los beneficios que su modelo de alquiler ofrece a nivel de sostenibilidad y protección del medioambiente, valiéndose de multitud de cálculos y estimaciones sobre la reducción de emisiones que su actividad y la del sector de la economía circular hacen posible. A través de estas métricas, Simplr consigue mostrar de una forma directa y comprensible a todos sus consumidores los beneficios añadidos de usar su servicio.
En el mundo de la moda, destaca el caso del servicio de alquiler de ropa Ecodicta, que apalanca parte de sus estrategias de comunicación y marketing en torno a la idea de ‘armario circular’, un novedoso concepto sobre el que están construyendo con éxito y del que la marca se está convirtiendo en abanderada.
Gran parte de los negocios de suscripción nacen con un propósito sostenible de forma intrínseca, por lo que encontrar la forma oportuna y eficaz de comunicarlo debe ser pilar fundamental de las estrategias de marketing y comunicación para comunicar de forma genuina su valor y compromiso.