ANDER BILBAO, CONSEJERO DE GRUPO SÖRENSEN Y PROFESOR DE ESODE Martes 19 de noviembre de 2013
ARTÍCULO PATROCINADO POR ESODE FORMACIÓN. Ander Bilbao,Fundador y Consejero Delgado de Grupo Sörensen desde 1990, y profesor en ESODE, ha pasado por distintas situaciones como organizador de eventos, muchas de las cuáles se han repetido a lo largo de los años. Esto le ha llevado a plantearse a sí mismo una serie de preguntas, a las cuales da él mismo respuesta.
¿Me ha llegado a sacar de quicio el sector de los eventos?
En todos los trabajos hay cosas que son capaces de sacarte de quicio, y en un trabajo tan polifacético como el de gestionar eventos, aunque reconozco que es apasionante, variado y muy emocional; siempre hay cosas que te sacan de tus casillas.
¿Por qué cuándo todo está aprobado, nadie le había preguntado al presidente?
He visto muchas veces cómo después de un briefing, un concurso, un ajuste, un contrabriefing, ha llegado nuestra idea a la dirección general y ellos tenían muy claro lo que querían comunicar en la convención de ese año. Y, siendo los presidentes y directores generales actores principales en este tipo de eventos, parece sensato que se les pregunte qué mensaje están pensando en dar antes del proceso de brief y dbrief…pero es un hecho que eso lo recibimos normalmente con buena cara las agencias porque supone que ya has sido nombrado adjudicatario del proyecto.
Pero la verdad es con el asentamiento de la crisis también se ha establecido un modelo cuyas consecuencias son muy parecida. Me refiero a “me ha encantado vuestro proyecto pero me lo tenéis que re-pensar con un 40% menos de presupuesto”. Que supone que vuelves a trabajar el proyecto casi desde cero
¿Por qué parece que lo puede hacer todo el mundo?
Se ha instalado la sensación en muchos clientes, que al tener que hacerlo con menos presupuesto, lo pueden hacer ellos mismos, porque basta con contratar a cuatro proveedores para hacerlo. Pero como casi todo en la vida es el motor de las ideas el que hace las cosas diferenciales, sugerentes y trasmisoras. La tortilla de patatas siempre ha llevado los mismos elementos pero los resultados son muy diferentes según el cocinero y a eso hay que sumar que a alguno se le ocurrió hacerla desestructurada y eso ayudó a propulsar su marca enormemente.
En los eventos la agencia aporta valor añadido dotándoles de creatividad efectiva y consiguiendo un hilo conductor que da sentido a todo lo que se realiza. Además lleva una gráfica que ha de ser consecuente en el site, en la invitación, en el video promocional, en la decoración de la sala y en todo lo que rodee al evento para que todo comunique igual. Animo a todos a dar sentido común a los eventos y evitar los pastiches que se producen al sacar de una única coordinación los distintos oficios de una comunicación en directo.
¿El sector de los eventos tiene una medida de tiempo diferente? Es muy sencillo y corto de responder, porque el tiempo del cliente se acaba al haber dado el brief, revisado los diseños y realizado los ensayos al acabar el evento. Normalmente cuando se acaban esos tiempos del cliente los tiempos del sector de eventos continúan, haciendo los diseños, organizando las modificaciones, terminando los montajes, haciendo ensayos técnicos para garantizar el éxito, preparando la sala dos horas antes de que todo comience, organizando el desmontaje… y eso hace que: ¡Básicamente nuestro tiempos de comer y dormir se estrechan enormemente!
¿Qué pasa tres minutos antes de que empiece un evento?
Ocurre que el espacio tiene un virus especial, que invita a hacer un último cambio, a mover una última cosa, a pedir un último detalle. ¿Por qué no surgió ese elemento que pone en riesgo el principio del evento antes?, ¿Por qué no en el ensayo?, ¿Por qué no en el montaje?, ¿Por qué no durante los renders?, ¿Por qué no en el planteamiento inicial?… Pues muy sencillo: porque esto es comunicación en directo, y todo puede cambiar, y hay que tener la experiencia y la autoridad para cambiarlo o para decir que no lo cambias porque se pone en riesgo el éxito de la acción.
¿Por qué tres segundos pueden parecer un agujero negro del universo?
El otro día tuve el placer de asistir a una gala de entrega de premios sin tener nada que ver con ella, como simple asistente, descansado, expectante y atento a cuanto acontecía a mi alrededor tratando de disfrutar de la experiencia y de ver que podía aprender de ella. Pero en uno de los momentos claves cuando el presentador dio entrada a un video y ese no entró inmediatamente sino que tardo unos breves segundos… mi cuerpo se tensionó, se recolocó en el asiento, miró hacia el equipo técnico y otra vez al escenario, y en ese giro brusco de cabeza descubrí que la sala estaba tranquila, nadie alterado, ningún comentario… La gala seguía y nadie había apreciado y a nadie le había importado que el video entrara tarde.
Y me di cuenta de lo que es tener esa tara generada, a base de estar a los mandos de muchos eventos con la sensación de que te juegas la vida en cada pequeña cosa. Pero la verdad es que la vida luego es más sencilla del lo que a veces imaginamos clientes y agencias.
¿Qué evitaré hacer si algún día soy famoso?
Prometo firmemente que si algún día soy famoso seguiré siendo una persona normal, trataré de ensayar cuando me lo piden, no pediré cosas raras para mi camerino, trataré a la gente igual que hoy. No dejaré que la agencia panique llegando en el último segundo, seré dialogante y razonable, prepararé mi trabajo y lo estudiaré con la responsabilidad del contrato que me une. Nunca faltaré a mi compromiso si no es por fuerza mayor y trataré de dar siempre un pelín más de lo que decía el contrato que tenía que hacer.
¿Por qué a pesar de todo nos vuelve loco este sector? ¿O es que te forras?
El motor no es el dinero en un sector donde los trabajos cada vez se trocean más, donde el precio es muy mandatorio y donde la competencia es mucha y en muchos casos muy desigual y desleal. El motor es la creatividad de hacer cada día una cosa diferente, la ilusión de generar proyectos que provocan resultados, los nervios del directo, la emoción de las sensaciones en directo, el sentimiento de los objetivos conseguidos…y eso te atrapa te engancha y te hace sonreír.