El Observatorio, realizado por PROA Comunicación, contó con un panel de ponentes integrado por el director global de Relaciones Laborales de Hewlett Packard Enterprise, José Antonio González; la tesorera y responsable de Estrategia Social y Sostenibilidad del Consejo General de Colegios Farmacéuticos, Ana López-Casero; la tesorera general y vocal de Salud Mental del Consejo General de Enfermería, María del Mar García Martín; y la doctora y catedrática de Psiquiatría, Psicología Médica y Psicopatología de la Universidad Complutense de Madrid, María López-Ibor, conducidos por Dolors Marco, directora del Área Salud, Farma y Tecnología Médica de PROA.
Por Redacción, 28 de abril de 2023
José Antonio González puso de relevancia la necesidad de que las empresas incorporen una mayor flexibilidad en su relación con los profesionales, se debe tener en cuenta que son “personas” y cada una aúna diversas peculiaridades: “nada tiene que ver un soltero, con una mujer embarazada, o con un padre con niños pequeños, o un profesional más mayor con mucha experiencia. Tenemos que ser capaces de adaptar el modelo de trabajo a cada una de estas circunstancias”.
José Antonio González puso de relevancia la necesidad de que las empresas incorporen una mayor flexibilidad en su relación con los profesionales, se debe tener en cuenta que son “personas” y cada una aúna diversas peculiaridades: “nada tiene que ver un soltero, con una mujer embarazada, o con un padre con niños pequeños, o un profesional más mayor con mucha experiencia. Tenemos que ser capaces de adaptar el modelo de trabajo a cada una de estas circunstancias”.
La psiquiatra María López-Ibor, explicó que España es uno de los países donde más ansiolíticos se consumen y se debe a que “estamos en una sociedad que evita el sufrimiento. Necesitamos sentir un alivio inmediato ante cualquier alteración y tendemos a medicalizarla porque queremos una solución rápida”. López-Ibor destacó que, justo después de la pandemia, se ha actualizado la estrategia de salud mental que databa de 2007. “Esto demuestra el gran impacto psicológico que ha tenido la COVID-19 en nuestras vidas”, apunta.
Por su parte, María del Mar García, vocal de Salud Mental del Consejo General de Enfermería, destacó sus más de 30 años de experiencia como enfermera de Salud Mental, “la especialidad del hospital que nadie quería, en la que nadie invertía. Con la pandemia se ha eliminado ese manto y se ha observado que hay una cierta aceptación en lo que respecta a nuestra salud mental, es algo muy bueno porque ya se habla de ello, ya no es el tema tabú. Además, una vez que se pone el foco y se normaliza, se pueden aportar ideas, soluciones y mejoras”.
Ana López-Casero del Consejo General de Colegios Farmacéuticos, destacó que el coste estimado de la salud mental en España es del 4,2% del PIB, pero el gasto real solo cubre el 10% de ese coste. En suma, sólo el 60% de los centros asistenciales prestan servicios de salud mental, por lo que hay “una seria carencia de recursos para paliar los problemas derivados de este desequilibrio, sin embargo, es importante destacar la gran relevancia de que este tema haya saltado a las agendas políticas de los grandes decisores de nuestro país”.
Para concluir, María López-Ibor ejemplificó la lucha entre el lobo bueno y el lobo malo que todos llevamos dentro y según a qué lobo alimentemos más, nos convertiremos en ese modelo de persona. La moraleja está clara, la actitud con la que te enfrentes a la vida determinará tus posibilidades de éxito o de fracaso. Tener una actitud positiva nos ayudará a encontrar soluciones más rápidamente.