31 de mayo de 2022
El merchandising es una acción comercial que se mantiene muy viva y activa por parte de las empresas, que encuentran en ella una fórmula eficaz y rápida de llevar su logo a un alto porcentaje de público. La llegada de la época estival es un buen momento para poner en marcha este tipo de campañas y los regalos promocionales de verano son ahora muy solicitados por los responsables de marketing. Las posibilidades son múltiples y variadas, y el efecto es muy positivo, pues además de obtener una buena respuesta por parte del receptor del regalo, la visibilidad de éste será muy grande, ya que está ideado para zonas de grandes concentraciones de gente como las playas o piscinas.
¿Qué puede regalar mi empresa a sus clientes para este verano?
Cualquier producto relacionado con el agua tiene un buen efecto. El mejor ejemplo es la toalla, un elemento indispensable para cualquier persona que quiere pasar unas horas en la playa. Si el público objetivo de la compañía está relacionado con los niños, entonces se puede optar por diferentes tipos de hinchables como balones o colchonetas. Los pequeños juegan con ellos mientras los padres verán el logo estampado en el plástico. La sombrilla es otro de los artilugios estrella para personalizar este verano, pues tiene una enorme visibilidad. Una playa convencional en España puede recibir miles de visitantes a lo largo de un día. Esto significa un público muy amplio que contempla el nombre de la firma. Chanclas y gorros son también productos que encajan bien en regalos promocionales para lucir en la etapa más calurosa del año.
Las bolsas merecen una mención a parte, pues han adquirido un nivel de sofisticación y utilidad tan alto que reciben una gran valoración por parte de los usuarios. Durante los meses de verano ganan protagonismo los modelos que se convierten en nevera, pues mantienen el frío de los productos que están guardados en ella y son un complemento indispensable para los largos días de playa. La ventaja de las bolsas es que se pueden utilizar durante todo el año, ya sean especializadas o convencionales. Es habitual ver firmas de empresas estampadas en un artilugio de estas características.
El calor está presente en todos los rincones, así que hay ciertos elementos necesarios que, en muchas ocasiones, se escapan del pensamiento de las personas; pero que tienen una gran utilidad. Es el caso del parasol para el coche. Se puede colocar tanto en una ventanilla lateral como en los cristales frontal y trasero; y el resultado es muy beneficioso para el dueño del vehículo. Es, además, un componente que responde a la búsqueda de la mayor perceptibilidad por parte del público.
Pocas personas piensan en comprarse un palo selfie, pero si lo reciben de regalo, les dan una gran utilidad. También se enmarcan muy bien en una acción comercial para el próximo verano las gafas de sol y su cinta correspondiente, los abanicos o los ceniceros. El objetivo es dar con la tecla de productos útiles y que reciban un uso frecuente.
