REDACCIÓN Sábado 8 de septiembre de 2018
Torres y Carrera celebra este año el 15º aniversario de su nacimiento. Xurxo Torres, socio fundadora, nos habla de los primeros años, del crecimiento y del futuro de la agencia.
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Para Xurxo Torres, «nuestra historia se resume en una convicción, creemos que nuestra actividad contribuye a mejorar la relación entre el mundo de la empresa y la sociedad. A lo largo de estos 15 años nos hemos regido por este principio y mantiene toda su vigencia. Servía en el mercado local, lo ha hecho en el nacional y lo demanda, más que nunca, la sociedad global en la que vivimos».
¿Cómo surgió la idea? ¿Cómo fueron los primeros años?
En 2003, Paula Carrera y yo llegamos a la conclusión de que había campos por explorar en el ámbito de la comunicación de empresa que no se estaban abordando. En aquel momento decidimos apostar por un mercado local como el de Vigo con un potencial económico muy grande y cultura comunicativa por desarrollar. Fue una apuesta arriesgada, pero los resultados han mostrado el acierto de esa lectura.
La agencia nació con vocación local. ¿Cómo surgió la iniciativa de saltar a la arena nacional?
En realidad, nunca nos hemos interpretado como locales o como nacionales. Estamos donde lo demanda el mercado. Y el mercado es global. Los clientes que gestionábamos en Vigo en nuestros inicios eran globales. Nuestro radio de acción siempre ha ido más allá de una interpretación territorial. Estamos donde debemos estar para conjugar los intereses del mercado y la sociedad. Estamos en Madrid, pero no hemos dejado Vigo. También estamos en Barcelona y en Valencia. No sé si somos nacionales o multi-locales, en cualquier caso, nuestra vocación siempre ha sido global.
Una de vuestras últimas apuestas ha sido crear la red internacional COMbyCOM. ¿En qué consiste?
COMbyCOM es un reflejo de la sensibilidad global que nos define como empresa. El perímetro de nuestra actividad es cada vez más difuso. El mercado demanda un conocimiento multidisciplinar de la comunicación (relaciones públicas, publicidad, marketing, digital…) y una llegada más audaz e intensiva a las audiencias. La combinación de ambos retos nos animó a contactar con empresas relacionadas con ese amplio espectro comunicativo y que operan en el mercado global (de momento, acotado a Iberoamérica). Empresas independientes con vocación de explorar nuevos horizontes de la profesión.
¿Cuál ha sido la decisión más difícil que habéis tomado a lo largo de todo este tiempo?
Cualquier despido. Nunca tuve en mente convertirme en empresario. Como mucho aspiraba ser un profesional liberal. Sin cargas. La evolución de nuestra compañía me ha obligado a asumir este rol. Y cada vez que -a lo largo de estos 15 años- he tenido que gestionar un despido lo he pasado muy mal. Más allá de la decisión ejecutiva, lo considero siempre un pequeño fracaso personal. Soy incapaz de eludir la responsabilidad que me compete y que va desde hacer una mala lectura en la contratación a no haber sabido encontrar una fórmula para evitar esa ruptura. Sé que puede sonar extraño, pero a día de hoy, me siento responsable de todas y cada una de estas situaciones. Pero esta sensación no me paraliza. Por el contrario, me empuja, me anima a intentar ser mejor.
¿Quieres confesar algún error cometido?
He cometido muchos errores. Sinceramente no sé por cual decantarme. Me quedo con que el balance entre errores y aciertos es que hemos conseguido consolidar la compañía en un periodo histórico definido por la gran recesión. Así que sí, he cometido muchos errores, pero se ve que ninguno capital.
¿Y el mayor acierto?
Apostar por el talento. Soy un entusiasta de las personas. Me encanta encontrarme con gente con la que me gusta -o me gustaría- trabajar. Es obvio que a lo largo de estos quince años he tenido todo tipo de experiencias -buenas y malas- con la gente, pero ninguna de las malas ha lastrado mi capacidad por ilusionarme con un nuevo proyecto, un nuevo colaborador.
Háblanos de tu equipo
Somos un equipo increíble. ¿Ves como soy un entusiasta? En serio, creo que el éxito de Torres y Carrera reside en el talento que tenemos instalado. Todos nuestros directores cuentan con un perfil que combina experiencia y conocimiento con mentes abiertas a la evolución del negocio. Y los ejecutivos se suman al proyecto sabiendo que existe un plan de carrera real en el que puedes ascender hasta donde tú quieras. Todo esto se nota en el clima de trabajo, en la solidaridad entre compañeros y en la asunción de que todo lo que sabemos es efímero y debe ser renovado de manera práctica y eficaz.
¿Qué proyectos de futuro tenéis?
El mañana nos encima tanto que más que de futuro son proyectos de presente. Estamos inmersos en una constante transformación tecnológica para mejorar nuestros procesos y nuestros productos. Ahondamos en la gestión del big data enriqueciendo el dato con la emoción, adaptamos las técnicas de marketing digital procurando optimizar eficacia sin ser narcotizantes o molestos y exploramos el branded content con la visión corporativa más liviana posible. Nunca nos aburrimos.
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